Bebo en tu boca
el instante,
la luz,
el viento.
Bebo en tu boca
tu mirada,
tus pasos,
tu canto.
Bebo en tu boca
el amanecer,
la flor que cae
y un llanto
lejano y lento,
Bebo
y no paro de beber
el hilo tan sutil
de vida en llamas
que de tu boca a la mía
salta uniendo en tu sabor,
en el sabor de tu deseo,
lo fugaz
a lo eterno.
Si es cierto
que el alma es aire
y que en la palabra espíritu
hay un soplo,
yo bebo,
muy poco a poco,
tu alma
en cada beso.
en cada beso.
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2 comentarios:
Wow, hermoso poema, y me encantan las fotografias, muy acorde!
Alberto: Qué poema,yo sólo te digo:
En cada beso que me dio, me quedé no con su alma,pero sí con su esencia.
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