tendidas en el sofá
miran al mundo
mirarlas.
Y el sol atrás
dibuja palmeras fugaces
para abanicarte.
Un barandal y el mar
se perfilan
a tu espalda
llamándote
sin respuesta.
Tal vez los escuchas
mientras me miras.
Tu sofá,
como una ola
detenida
en su momento más alto.
Y tú sobre la ola,
como aparición
de una Venus reclinada
y con gatita.
Mientras atrás
el sol dibuja
y dibuja tenaz
contra el viento
cada detalle
de esplendor
en el mundo
de Silencios
que creaste.
1 comentario:
Amo tu poesía, Alberto. ¡Gracias!
Publicar un comentario