martes, 28 de julio de 2015

EN LA MÚSICA DE TUS BRAZOS



Abro los ojos dormido,
cierro los ojos despierto.
Amanezco afuera
y adentro contigo.

Duermo
en la música de tus brazos
despierto
en tus dedos tocándome sostenido
duermo
en tus manos palpitando aceleradas 
sin saberlo
despierto
en la textura de tus labios
duermo
en la tenue obscuridad de tu aliento
despierto
en tu boca pronunciando
lentamente
el nombre sonámbulo
que me inventaste
duermo
en este sueño despierto.


El abrazo de los amantes se extiende dentro y fuera del sueño. Es un río sin nombre que cruza los mares visibles e invisibles del deseo.